lunes, 7 de diciembre de 2009

LA GUERRILA EN TUCUMAN

En los años 1974/75 la intensa lucha en los montes tucumanos no alteraba la vida de los argentinos quienes ignoraban que una organización terrorista, el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), pretendía nada menos que crear una "zona liberada o dominada" para obtener el reconocimiento internacional, paso decisivo para la toma del poder, instaurando un gobierno marxista-leninista.
El error que llevó al fracaso a estas organizaciones guerrilleras, fue el intento de simplificar la realidad y las enseñanzas recogidas, con la receta de guerra revolucionaria por el socialismo, inspiradas en la teoría "foquista" cuyo proyecto se basaba en la certeza que, desde el "foco" se podía desencadenar el proceso revolucionario y lograr así que la población se adhiriera a la propuesta (ELN).

Esta teoría priorizaba lo militar sobre lo político y al foco guerrillero como sustituto de un partido.


La realidad de los hechos demostró la utopía de tal intención.
La República Argentina fue el marco de una Guerra Revolucionaria que formó parte de una revolución mundial cuyo epicentro político e ideológico fue la URSS, el que pretendió extenderse en los países del Tercer Mundo, en especial Latinoamérica, para imponer un sistema marxista el que a pesar de los esfuerzos y recursos empeñados, no logró sus objetivos, tanto por la decidida acción de las FF.AA. de los países involucrados, como por el desinterés mostrado por la masa de la población.

Durante su exilio en España el General Juan Domingo Perón alentó entusiastamente a la estructura aún incipiente de Montoneros, dándoles en tal oportunidad nombre de formaciones especiales.

Posteriormente en 1973, desde la Casa de Gobierno repudió la presencia de esta organización y los expulsó de la Plaza de Mayo.

Fue precisamente durante su gobierno, el de Héctor Cámpora y el de María Estela Martínez de Perón, todos ellos presidentes constitucionales, cuando la actividad subversiva mostró su mayor virulencia, oportunidad en la que se produjeron las mayores bajas tanto entre los terroristas como en las fuerzas del orden.

La forma de operar de la guerrilla tanto en el monte tucumano como en las zonas urbanas, se ajustaba a los principios de la guerra revolucionaria, lo cual obligó a las FF.AA. y FF. SS. a una acelerada adecuación a esta forma de combate no prevista en la intensidad debida tanto desde el punto de vista doctrinario como en el operacional.

Ello obligó a una rápida adecuación al medio, disponer del equipo y armamento propios del ambiente donde se iba a combatir y sobre todo una templanza y un valor a toda prueba para enfrentar a un enemigo difuso, solapado y alejado de las leyes de la guerra.

El proceso subversivo en la provincia de Tucumán se vio favorecido por el vacío de poder (inmoralidad administrativa, infiltración marxista, limitado apoyo a las FF.SS. y FF.PP. y las condiciones socio-económicas).

A su vez la población no proclive a apoyar a la guerrilla se hallaba falta de sostén de las estructuras provinciales y desorientados respecto al adoctrinamiento persuasivo conminatorio de aquellas.

Con el triunfo del Ejército y el acertado plan de acción cívica urbano y rural, el pueblo tucumano mostró su rechazo al ideologismo subversivo y un reconocimiento a las obras realizadas por el gobierno provincial.

La compleja situación subversiva en Tucumán a poco de iniciarse la acción armada en la zona rural, comenzó a trascender el marco de la provincia; también dejó de ser una responsabilidad exclusiva del Ejército.

La intensidad de los combates, el progresivo y peligroso despliegue de la guerrilla, el reclutamiento de voluntarios que el ERP realizaba en todo el país, el apoyo financiero que proporcionaba Montoneros, el aliento que la organización recibía del exterior, fueron suficientes elementos de juicio para deducir que el destino del país podía decidirse en una zona de operaciones aún no bien delimitada y plagada de incertidumbre y de sorpresas.


La Operación Independencia, iniciada el 9 de febrero de 1975, constituyó una acertada decisión, tanto por la oportunidad en que fue lanzada como por la planificación estratégico-táctica con que fue concebida.


El ERP a su vez se vio obligado a enfrentar a las fuerzas legales contrariando su proyecto político-militar y la idea de maniobra de la Ca Mte Ramon Rosa Jimenez que debía "ser ejecutada con energía, combatividad, audacia e inteligencia".

El combate de Manchalá ocurrido el 28 de mayo de 1975, constituyó un acontecimiento decisivo en la Operación Independencia.

La derrota sufrida por el ERP marca un hito trascendente de la campaña y desnudó el falso mito del valor en combate de los guerrilleros integrantes de la Ca Mte Ramon Rosa Jimenez.

Abandonaron vehículos, armamento, equipos de comunicación, herramientas, vestuario, material quirúrgico y una abundante documentación que permitió localizar e individualizar a 402 integrantes de la organización.

Las bajas fueron 17 combatientes.

Al decir del Grl. Vilas, "la fuga de los guerrilleros sobrevivientes fue vergonzosa".

El nombramiento del Grl Antonio Domingo Bussi al frente de la Br I V en reemplazo del Grl Adel E Vilas incorporó una particularidad.

El Gobierno Nacional decidió que asumiera -además del cargo militar- la conducción política de la provincia de Tucumán.

Tal medida, que debió haberse adoptado desde el comienzo mismo de la Operación Independencia, permitió llevar a cabo una estrategia integral actuando sobre la guerrilla a través de exitosos operativos (Lamadrid I, II, III, Fanfarria, Monteros, Albergue, etc.) de cerco y rastrillaje, hostigamiento y eliminación de los focos residuales y simultáneamente intensificar la acción cívica, tendiente al mejoramiento de las condiciones socio-económicas de la población.

Los resultados obtenidos permitieron que la provincia recuperara una paz merecida, un sensible progreso y la guerrilla pusiera en evidencia el fracaso militar de su intentona.

La derrota militar del ERP fue expresamente señalada por el Comité Central del PRT en 1974, cuando afirmó que "el proyecto era preparar una unidad sólida a nivel compañía, capaz de desarrollar un plan operativo militar ofensivo y entrar en combate en el momento oportuno, pero las Fuerzas Armadas la obligó a anticiparse iniciándose así un proceso de guerrillas que no supimos controlar.

También la obligó el condicionamiento de la subordinación de la acción política a la lucha militar".

Montoneros no realizó operaciones militares significatiyas en la zona rural de la provincia de Tucumán.

Su presencia fue de carácter político, aprovechando el clima subversivo imperante en todo el país entre 1973 y 1975.

Tenía gran capacidad de movilización y de propaganda y un sólido respaldo financiero.

Ello permitió al ERP desarrollar con mayor facilidad la guerrilla rural al comienzo de las operaciones.

La derrota del PRT- ERP en Tucumán constituyó el comienzo de su agonía como estructura militar y, fundamentalmente, una "bisagra" del antes y el después de las actividades subversivas en el país.


Fueron vencidas sin atenuantes a través de las armas, aunque la realidad contemporánea demuestra que la guerra no ha concluido; la hábil y persistente maniobra psicológica desde el exterior y en el país, continúa sin tregua y el blanco elegido son las FF.AA las que, merced a esa acción han alcanzado un alto grado de desprestigio y marginación.

En este trámite de ejecución progresivo, las FF.AA. constituyen un objetivo intermedio.

La intención finalista, como fue hace tres décadas, es la toma del poder.

A partir de 1976 y luego de las severas derrotas sufridas por el ERP durante la Operación Independencia y en el frustrado asalto al cuartel de Monte Chingolo, el ERP trató de evitar el aniquilamiento de sus fuerzas; intentó además, reorganizar su estructuras y buscar el apoyo exterior especialmente de las organizaciones de derechos humanos y de los medios de comunicación social.

En los últimos años del siglo pasado y en lo que va de este el mundo se ha visto conmovido por otras formas de conflictos que se producen solapada y sorpresivamente en lugares y momentos inesperados.

Tales organizaciones se hallan dispuestas a imponer sus propios valores e intereses a través de la violencia.

Se trata del terrorismo posmoderno que se está convirtiendo en un mal endémico de difícil erradicación.

La extrema violencia que vivió nuestro país durante en las ultimas décadas del siglo pasado, la metodología que aplicaron las organizaciones terroristas, en la que el crimen, los atentados y los secuestros indiscriminados eran de diaria ejecución, unida a la sospecha de un progresivo y activo accionar, esta vez infiltrados en los frecuentes actos de reclamos populares, manifestaciones masivas, etc., compromete al Gobierno Nacional a adoptar anticipadamente las previsiones que incorpore a todas las áreas involucradas -inclusive las FF.AA.- en una política antiterrorista en todas sus formas que oriente las estrategias sectoriales, evitando de tal manera sorpresas y situaciones que puedan reeditar los hechos que conmovieron dolorosamente a la sociedad argentina.

CONCLUSIÓN FINAL.


1 .- Debemos reconocer y aceptar que en Tucumán hubo una guerra cruel y descarnada en la que seguramente se cometieron errores, pero lo que importa rescatar es que la agresión no fue provocada por el gobierno constitucional ni por las instituciones armadas.


2.- El terrorismo subversivo que olvidó a la Constitución y decidió apelar a las armas para acceder al poder, resultó ser un protagonista que atentó contra la democracia y sus instituciones, haciendo peligrar la existencia misma de la Nación.

Hubo que enfrentarlas sin alternativas ni flaquezas.

Se hizo así, como se pudo.

3.- Hoy, aunque gran parte de nuestra sociedad "olvida" que hubo una guerra provocada y perversa, y porque no decirlo, también ocultada, podemos afirmar que se logró el objetivo: devolver la libertad y la afirmación de sus valores morales, espirituales y culturales a todos los argentinos. Ello merced a que alguien con valor, desinterés, sacrificio y amor a la Patria, luchó para que así ocurriera.

lunes, 23 de noviembre de 2009

COPAMIENTO DE SANTA LUCIA

PARTE DE GUERRA DE LOS GUERRILLEROS DEL ERP

Tucumán, Septiembre de 1974.

Al pueblo.

El día viernes 20 de septiembre a las 20.30 hs, una sección de la COMPAÑíA DE MONTE "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ" DEL ERP procedió a copar la localidad de SANTA LUCIA con el objetivo de cumplir la sentencia contra EUDORO IBARRA y HÉCTOR OSCAR ZARASPE.


Ambos declarados culpables por un tribunal revolucionario de las torturas y posterior asesinato del combatiente del pueblo RAMÓN ROSA JIMÉNEZ, ocurrido en la noche del 16 de octubre de 1972.

Luego de copar la Central Telefónica y la Comisaría local, los integrantes de nuestro Ejército Guerrillero ubicaron e identificaron a los sentenciados, procediéndose inmediatamente a su ajusticiamiento público.

Cumpliendo así este acto de justicia revolucionaria contra esos dos enemigos del pueblo, la sección se retiró ordenadamente hacia su base de operaciones.

Cumplimos en hacer conocer a nuestro pueblo el detalle de los elementos recuperados para la causa popular en la Comisaría de Santa Lucía:

Pistola Colt Nro 6381 de la Policía de la Capital Federal.

Revólver calibre 38 de la Policía de Tucumán.

25 proyectiles calibre 11,25 y 3 calibre 38.1 correaje completo.

1 cartuchera y 2 cargadores.

1 máquina de escribir portátil Olivetti.

Documentación personal y policial.

3 sellos y $ 24.000 de recaudación de multas.


domingo, 22 de noviembre de 2009

COMBATE DE PUEBLO VIEJO

Tucumán 14-2-75. AL PUEBLO ARGENTINO.
En el día de la fecha, en momentos en que una patrulla de nuestra Compañía integrada por un compañero Sargento y cinco compañeros combatientes efectuaba tareas de reconocimiento en la zona de Pueblo Viejo, al cruzar un camino fue atacada por una patrulla del Ejército Contrarrevolucionario que rastreaba la zona con perros.

Nuestros compañeros fueron sorprendidos por una voz de Alto y al segundo una cerrada descarga del enemigo.
Ante esto, los combatientes del Ejército del Pueblo reaccionaron con rapidez haciendo cuerpo a tierra a la vez que se dispersaban repeliendo el ataque.

En este combate nuestra unidad tuvo dos bajas, los compañeros Daniel y Tito que combatieron heroicamente hasta su muerte, como sólo lo hacen quienes están dispuestos a dar sus vidas por su pueblo y por su patria.
Hacemos resaltar que ambos combatientes se habían incorporado recientemente con la misión de realizar un curso militar en el monte.

A su vez el enemigo, a pesar de la superioridad numérica y de contar con el factor sorpresa a su favor, tuvo las siguientes bajas: un oficial (Tte. 1ro) muerto, otro oficial (Tte.) herido gravemente, paralítico, y por lo menos dos heridos más (1 oficial y 1 suboficial).

¡¡ GLORIA A LOS COMPAÑEROS TITO y DANIEL !!
¡¡ LA COMPAÑÍA DE MONTE RAMÓN ROSA JIMÉNEZ VENCERÁ !!
¡¡ A VENCER O MORIR POR LA ARGENTINA!!

Ejército Revolucionario del Pueblo.

sábado, 21 de noviembre de 2009

POTRERO DE LAS TABLAS

LA COMPAÑÍA DE MONTE RAMÓN ROSA JIMÉNEZ.

En acción:
El día sábado 18 de enero, una Sección de nuestra Compañía tomó localidad de POTRERO DE LAS TABLAS llevando adelante los siguientes objetivos:

Asamblea con los pobladores de la zona, en su gran mayoría campesinos pobres.

Copamiento y quema del destacamento policial.

Ajusticiamiento de "El Besuco" CÓRDOBA.

Allanamiento de la Fina NORRIS y recuperación del aparato transmisor.
Habiendo tomado posiciones en el poblado, nuestra Compañía comenzó a cumplir paso por paso con el Plan de Operaciones.
Varios compañeros hicieron una recorrida casa por casa invitando a la Asamblea.
Una vez reunidos los pobladores en el Almacén, dio comienzo al acto, haciendo uso de la palabra un combatiente.
Los pobladores no son propietarios de tierra alguna y dependen de la voluntad de unos pocos terratenientes, que son los únicos dueños de la tierra; ellos son NORRIS, NOUGUES, MEDINA y otros.
Estos grandes señores no permiten que nadie cultive sus tierras y ellos tampoco siembran nada o muy poco.
Así también se aprovechan cobrando por pastaje $ 1500 por cabeza y por mes, de la hacienda de los campesinos.
Al ser imposible que alguien pague eso, los pobladores se ven obligados a largar los animales al camino o al monte, de donde se los cuatrerean enseguida.

La gente con gran interés y entusiasmo escuchaba con atención las palabras de nuestro compañero.

También se habló por qué luchamos por el Socialismo, que es donde el campesino y todos los trabajadores encontrarán su felicidad y la solución de todos sus problemas.
La consigna de nuestra lucha es "LA TIERRA PARA QUIEN LA TRABAJA".

Luego habló otro compañero explicando el sentido de la ejecución de "El Besuco".
Toda la gente coincidió aprobando la sentencia de la Justicia Popular, porque además de haber sido un delator y colaborador voluntario como guía de la Policía y el Ejército en el último operativo camino a "El Rodeo", "El Besuco", protegido por NORRIS se dedicaba a robar los animales que la gente largaba a pastar en el camino o en el monte.

Finalmente un tercer compañero se refirió al incendio del destacamento policial.
Explicó que se lo hacía como repudio a las fuerzas represivas. También hizo pública una advertencia a NORRIS por su actitud de abierta colaboración con la Policía.

Durante todo el acto los combatientes estuvieron formados en fila con nuestro abanderado al frente.
En un momento se entonó la marcha del E.R.P.

En forma simultánea un grupo de compañeros allanó la Finca Norris expropiando la radio y algunas armas y procediendo a detener al traidor y delator "El Besuco".
Otro comando realizaba la quema del destacamento de la Policía.

Una vez completadas las acciones, se organizó la retirada en perfecto orden, y luego de algunos kilómetros de marcha se procedió a ajusticiar a "El Besuco" CORDOBA, después de haberlo interrogado.

Cumplido este acto de Justicia Popular nuestra Compañía de Monte inició el retorno a su campamento.

viernes, 20 de noviembre de 2009

LA GUERRILLA EN TUCUMAN

(13 de agosto - 2 de septiembre 1974)
En los años 1974/75 la intensa lucha en los montes tucumanos no alteraba la vida de los argentinos quienes ignoraban que una organización terrorista, el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), pretendía nada menos que crear una "zona liberada o dominada" para obtener el reconocimiento internacional, paso decisivo para la toma del poder, instaurando un gobierno marxista-leninista.

El error que llevó al fracaso a estas organizaciones guerrilleras, fue el intento de simplificar la realidad y las enseñanzas recogidas, con la receta de guerra revolucionaria por el socialismo, inspiradas en la teoría "foquista" cuyo proyecto se basaba en la certeza que, desde el "foco" se podía desencadenar el proceso revolucionario y lograr así que la población se adhiriera a la propuesta (ELN).

Esta teoría priorizaba lo militar sobre lo político y al foco guerrillero como sustituto de un partido. La realidad de los hechos demostró la utopía de tal intención.

La República Argentina fue el marco de una Guerra Revolucionaria que formó parte de una revolución mundial cuyo epicentro político e ideológico fue la URSS, el que pretendió extenderse en los países del Tercer Mundo, en especial Latinoamérica, para imponer un sistema marxista el que a pesar de los esfuerzos y recursos empeñados, no logró sus objetivos, tanto por la decidida acción de las FF.AA. de los países involucrados, como por el desinterés mostrado por la masa de la población.

Durante su exilio en España el General Juan Domingo Perón alentó entusiastamente a la estructura aún incipiente de Montoneros, dándoles en tal oportunidad nombre de formaciones especiales.

Posteriormente en 1973, desde la Casa de Gobierno repudió la presencia de esta organización y los expulsó de la Plaza de Mayo.

Fue precisamente durante su gobierno, el de Héctor Cámpora y el de María Estela Martínez de Perón, todos ellos presidentes constitucionales, cuando la actividad subversiva mostró su mayor virulencia, oportunidad en la que se produjeron las mayores bajas tanto entre los terroristas como en las fuerzas del orden.

La forma de operar de la guerrilla tanto en
el monte tucumano como en las zonas urbanas, se ajustaba a los principios de la guerra revolucionaria, lo cual obligó a las FF.AA. y FF. SS. a una acelerada adecuación a esta forma de combate no prevista en la intensidad debida tanto desde el punto de vista doctrinario como en el operacional.

Ello obligó a una rápida adecuación al medio, disponer del equipo y armamento propios del ambiente donde se iba a combatir y sobre todo una templanza y un valor a toda prueba para enfrentar a un enemigo difuso, solapado y alejado de las leyes de la guerra.

El proceso subversivo en la provincia de Tucumán se vio favorecido por el vacío de poder (inmoralidad administrativa, infiltración marxista, limitado apoyo a las FF.SS. y FF.PP. y las condiciones socio-económicas).

A su vez la población no proclive a apoyar a la guerrilla se hallaba falta de sostén de las estructuras provinciales y desorientados respecto al adoctrinamiento persuasivo conminatorio de aquellas.

Con el triunfo del Ejército y el acertado plan de acción cívica urbano y rural, el pueblo tucumano mostró su rechazo al ideologismo subversivo y un reconocimiento a las obras realizadas por el gobierno provincial.

La compleja situación subversiva en Tucumán a poco de iniciarse la acción armada en la zona rural, comenzó a trascender el marco de la provincia; también dejó de ser una responsabilidad exclusiva del Ejército.

La intensidad de los combates, el progresivo y peligroso despliegue de la guerrilla, el reclutamiento de voluntarios que el ERP realizaba en todo el país, el apoyo financiero que proporcionaba Montoneros, el aliento que la organización recibía del exterior, fueron suficientes elementos de juicio para deducir que el destino del país podía decidirse en una zona de operaciones aún no bien delimitada y plagada de incertidumbre y de sorpresas.

La Operación Independencia, iniciada el 9 de febrero de 1975, constituyó una acertada decisión, tanto por la oportunidad en que fue lanzada como por la planificación estratégico-táctica con que fue concebida.

El ERP a su vez se vio obligado a enfrentar a las fuerzas legales contrariando su proyecto político-militar y la idea de maniobra de la Ca. Mte. R.R.J. que debía "ser ejecutada con energía, combatividad, audacia e inteligencia".

El combate de Manchalá ocurrido el 28 de mayo de 1975, constituyó un acontecimiento decisivo en la Operación Independencia.

La derrota sufrida por el ERP marca un hito trascendente de la campaña y desnudó el falso mito del valor en combate de los guerrilleros integrantes de la Ca. Mte. R.R.J. Abandonaron vehículos, armamento, equipos de comunicación, herramientas, vestuario, material quirúrgico y una abundante documentación que permitió localizar e individualizar a 402 integrantes de la organización.

Las bajas fueron 17 combatientes.

Al decir del Grl. Vilas, "la fuga de los guerrilleros sobrevivientes fue vergonzosa".
El nombramiento del Grl. Antonio D. Bussi al frente de la Br. I. V en reemplazo del Grl. Adel E. Vilas incorporó una particularidad.
El Gobierno Nacional decidió que asumiera -además del cargo militar- la conducción política de la provincia de Tucumán.
Tal medida, que debió haberse adoptado desde el comienzo mismo de la Operación Independencia, permitió llevar a cabo una estrategia integral actuando sobre la guerrilla a través de exitosos operativos (Lamadrid I, II, III, Fanfarria, Monteros, Albergue, etc.) de cerco y rastrillaje, hostigamiento y eliminación de los focos residuales y simultáneamente intensificar la acción cívica, tendiente al mejoramiento de las condiciones socio-económicas de la población.
Los resultados obtenidos permitieron que la provincia recuperara una paz merecida, un sensible progreso y la guerrilla pusiera en evidencia el fracaso militar de su intentona.

La derrota militar del ERP fue expresamente señalada por el Comité Central del PRT en 1974, cuando afirmó que "el proyecto era preparar una unidad sólida a nivel compañía, capaz de desarrollar un plan operativo militar ofensivo y entrar en combate en el momento oportuno, pero las Fuerzas Armadas la obligó a anticiparse iniciándose así un proceso de guerrillas que no supimos controlar.
También la obligó el condicionamiento de la subordinación de la acción política a la lucha militar".

Montoneros no realizó operaciones militares significatiyas en la zona rural de la provincia de Tucumán. Su presencia fue de carácter político, aprovechando el clima subversivo imperante en todo el país entre 1973 y 1975.
Tenía gran capacidad de movilización y de propaganda y un sólido respaldo financiero. Ello permitió al ERP desarrollar con mayor facilidad la guerrilla rural al comienzo de las operaciones.

La derrota del PRT-ERP en Tucumán constituyó el comienzo de su agonía como estructura militar y, fundamentalmente, una "bisagra" del antes y el después de las actividades subversivas en el país.

Fueron vencidas sin atenuantes a través de las armas, aunque la realidad contemporánea demuestra que la guerra no ha concluido; la hábil y persistente maniobra psicológica desde el exterior y en el país, continúa sin tregua y el blanco elegido son las FF.AA. las que, merced a esa acción han alcanzado un alto grado de desprestigio y marginación.

En este trámite de ejecución progresivo, las FF.AA. constituyen un objetivo intermedio. La intención finalista, como fue hace tres décadas, es la toma del poder.

A partir de 1976 y luego de las severas derrotas sufridas por el ERP durante la Operación Independencia y en el frustrado asalto al cuartel de Monte Chingolo, el ERP trató de evitar el aniquilamiento de sus fuerzas; intentó además, reorganizar su estructuras y buscar el apoyo exterior especialmente de las organizaciones de derechos humanos y de los medios de comunicación social.

En los últimos años del siglo pasado y en lo que va de este el mundo se ha visto conmovido por otras formas de conflictos que se producen solapada y sorpresivamente en lugares y momentos inesperados.
Tales organizaciones se hallan dispuestas a imponer sus propios valores e intereses a través de la violencia.
Se trata del terrorismo posmoderno que se está convirtiendo en un mal endémico de difícil erradicación.

La extrema violencia que vivió nuestro país durante en las ultimas décadas del siglo pasado, la metodología que aplicaron las organizaciones terroristas, en la que el crimen, los atentados y los secuestros indiscriminados eran de diaria ejecución, unida a la sospecha de un progresivo y activo accionar, esta vez infiltrados en los frecuentes actos de reclamos populares, manifestaciones masivas, etc., compromete al Gobierno Nacional a adoptar anticipadamente las previsiones que incorpore a todas las áreas involucradas -inclusive las FF.AA.- en una política antiterrorista en todas sus formas que oriente las estrategias sectoriales, evitando de tal manera sorpresas y situaciones que puedan reeditar los hechos que conmovieron dolorosamente a la sociedad argentina.

CONCLUSIÓN FINAL.

1 .- Debemos reconocer y aceptar que en Tucumán hubo una guerra cruel y descarnada en la que seguramente se cometieron errores, pero lo que importa rescatar es que la agresión no fue provocada por el gobierno constitucional ni por las instituciones armadas.

2.- El terrorismo subversivo que olvidó a la Constitución y decidió apelar a las armas para acceder al poder, resultó ser un protagonista que atentó contra la democracia y sus instituciones, haciendo peligrar la existencia misma de la Nación. Hubo que enfrentarlas sin alternativas ni flaquezas.
Se hizo así, como se pudo.

3.- Hoy, aunque gran parte de nuestra sociedad "olvida" que hubo una guerra provocada y perversa, y porque no decirlo, también ocultada, podemos afirmar que se logró el objetivo: devolver la libertad y la afirmación de sus valores morales, espirituales y culturales a todos los argentinos.
Ello merced a que alguien con valor, desinterés, sacrificio y amor a la Patria, luchó para que así ocurriera.

jueves, 19 de noviembre de 2009

GOLPE DEL ERP A LAS FUERZAS DE OCUPACION

EL RELATO QUE SE DETALLA A CONTINUACIÓN DESCRIBE EL PLANEAMIENTO QUE EL E.R.P REALIZÓ PARA ATACAR A UN AVIÓN C 130 DE LA FUERZA AÉREA ARGENTINA.

Cuando el ejército comenzó a operar en Tucumán, se busco la forma de golpearlo especialmente sobre los traslados de efectivos que venían a reprimir al pueblo tucumano.

Se barajaron muchas ideas pero el factor esencial fue la participación del pueblo, los indicios, los datos que aportaban, porque una organización revolucionaria siempre cuenta con el mejor servicio de informaciones:

el pueblo.

Así nos enteramos que había un canal de desagüe que cruzaba de lado a lado la pista.

Pero, ¿cómo podía ser que hubiera una cosa así y los milicos no la tuvieran controlada?

Sin embargo, el canal existía, y los milicos no lo tenían detectado o lo subestimaron.

Así les fue.

Verificado el dato, se decide operar.

Esta decisión se produce en medio de un clima represivo de ocupación.

Esto hay que recordarlo permanentemente para comprender las condiciones muy distintas a los de otros lugares del país en que se desarrollaban las operaciones.

Por otro lado esas mismas condiciones impedían que los compañeros que la llevaban adelante pudieran dedicarse "exclusivamente a ella; tenían que atender otras tareas, y eso toma tiempo.

El trabajo fue discontinuo.

En total de Marzo a Agosto, seis meses.

En ningún momento se vaciló, al contrario, cada avance del enemigo reforzaba la convicción de concretarla.

LA PUESTA EN MARCHA.

En las primeras observaciones se logró conocer el dispositivo de seguridad del aeropuerto.

Todo el área había sido declarada zona militar, y por lo tanto estaba prohibido el acceso y la circulación por ella.


Habían emplazado puestos con bolsas de arena, ametralladoras pesadas y vigías con binoculares en las torres y las entradas, una guardia móvil constante y junto con la llegada de cada avión, se apostaba en los extremos Norte y Sur de la pista, soldados con fusiles ametralladoras.

Era frecuente la presencia de helicópteros artillados que cumplían funciones de correo y cober1ura de los traslados.

Pero, como siempre, la gente había burlado esa vigilancia.

Se habían formado dos senderitos naturales.

Por esos caminitos se cruzaron armas, bolsos, ante la mirada indiferente de los guardianes que habían tenido que aguantar a fuerza de costumbre, el paso de la gente al trabajo o a su casa.

También observando, se notó que los vecinos normalmente cruzaban la acequia que corre paralela al aeropuerto y al hipódromo por unas piedritas, que permitían el cruce de ese vado, donde estaba la entrada al túnel, tapada con ramas.

A partir de allí se comenzó a entrar y luego a trabajar en la cañería.

Esta tenia 1,20m de alto por 0,70m de ancho.

Siempre corría agua, desperdicios, ramas, arañas y todo lo que sabemos que hay en un desagüe.

Los compañeros debían caminar y trabajar agachados.

Y cada entrada -se hicieron 11 en total- era una operación: iban armados, con un observador en la boca del túnel, y el permanente riesgo de que a un milico se le ocurriera ir a ver que pasaba con ese caño.

Once veces, once operaciones, algunas veces trabajando hasta doce horas adentro.

Otro elemento a tener en cuenta desde el inicio era el equipo que estuvo compuesto por un conjunto adecuado de compañeros.

LA OBRA DE INGENIERÍA.

El primer paso, una vez explorado el túnel fue determinar el lugar por donde este pasaba por debajo de la pista.

Un tabique de ladrillos donde se atrancaban ramas y basura, dio la posición exacta.

El tabique reforzaba el soporte de la pista.

Las cargas explosivas no se podían poner directamente en el túnel porque había que tratar de que al final de la instalación el lugar aguantara una inspección.

También existía la necesidad de atracar los explosivos con buenos soportes para dirigir la explosj6n, hacia arriba y evitar las pérdidas de energía hacia los dos extremos de la galería.

Por lo tanto, hubo que pensar en abrir un boquete en la pared, que era muy vieja y resistente (ver cuadro).

Primero se lo intentó con medios mecánicos, picos. maza, etc.

Pero no pasaba nada.

Entonces se pensó en utilizar explosivos de bajo poder.

Se hicieron pruebas afuera y se determino que era posible.

La primera vez el ruido fue tan grande y el agujero tan chiquito, que se temió seriamente por la suerte de la operación.

Al segundo intento con mas carga, se esperó el paso de un avión, para tapar el ruido.
Esta vez hubo suerte y se abrió un gran hueco.

En el boquete se colocó una carga explosiva con forma de cono invertido.

El cono estaba formado por:

1) en la punta, una semiesfera de 5 Kg. de TNT, 2) una capa de 60Kg. de Dietamon y 3) el resto, 95 Kg De Amonita.

Los explosivos estaban envueltos en bolsas de nylon bien atadas y cubiertas de grasa de litio, para evitar el paso de la humedad.

En la carga se colocaron una "roseta" de cinco puntas, que en cada punta tenia cuatro cápsulas detonantes Nº 8 y el resto de la carga recorridos por varios metros de cordón detonante.

Esto buscaba producir una explosión uniforme, máximo aprovechamiento de explosivo para garantizar romper la pista y afectar al avión.

De la carga, iniciada por electricidad, salía un grueso cable totalmente impermeable, que recorría 250m por el fondo del túnel hasta una boca de tormenta.

Allí se dejó colgado con una argolla, de manera que luego desde afuera se lo conectara a una fuente de energía con su pulsador.

El boquete se cerró de nuevo con ladrillos y en el escalón del túnel y en la boca de tormenta se colocaron dos carteles que decían:

“Peligro Alta Tensión –Agua y Energía”.

El trabajo llevó diez entradas.

La última fue para buscar dos herramientas y algunas cargas de revolver que habían quedado olvidadas por los compañeros.

LAS OPERACIONES COMPLEMENTARIAS.

Todos los elementos de la operación debían ser trasladados y probados.

Esto hizo necesario una buena cantidad de operaciones complementarias.

Los viajes para traer el explosivo, armas, equipos.

Las pruebas de los explosivos y los sistemas de detonación que se hicieron íntegramente en Tucumán, tanto las pruebas para hacer el boquete, como las necesarias para la operación en si misma.

La prueba del sistema eléctrico y los mecanismos de disparo, se hizo en una ruta abandonada, haciendo explotar el detonante en una bolsa de harina al paso de un coche, para calcular las distancias, la clase de obturador a emplear, etc..

Cada uno de estos pasos se hicieron armados, con una planificación previa, etc..

En una provincia de Tucumán ocupada por el Ejército federal, la gendarmería, y las fuerzas policiales de represión.

LA TERCERA ES LA VENCIDA.

La instalación llevó los, meses de Marzo a Junio.

A partir de allí, se comenzó a planificar y montar la ejecución propiamente dicha, teniendo en cuenta que la llegada y partida de los efectivos era mensual.

La boca de tormenta estaba frente a una casa.

Al lado había un baldío desde el cual se veía la pista y, en el baldío, una fosa, que vino al pelo para instalar al "tirador".

Un gran problema que tuvo que ser resuelto por medios de cálculos geométricos, fue determinar un punto de referencia para el tirador, en el cual al pasar el avión a través de ese punto y, la mira (una horqueta...) se supiera que estaba a la distancia justa para producir la explosión.

Esta debía darse para un avión que salía, porque estos van acelerando y no iban a poder frenar cuando vieran el estallido, como sucedió.

Otro gran problema era como concentrar un equipo y sus coches en pleno centro de Tucumán.

Durante el fin de Junio y Julio la operación se montaba cuando se sabía que venían aviones, y si bien había problemas no eran tan graves.

Pero luego se detectaron muchas irregularidades, y se decidió montarla todos los días.

El primer intento fue el 7 de Julio, donde se falló por siete minutos.

El segundo el 28 de Julio.

A partir de allí se montó todos los días, esperando 28 días.

Para eso se dio una “concentración dispersa", los compañeros mantenían la observaci6n y esperaban, confundidos como deportistas, botelleros y otras ocupaciones.

Totalmente dedicados a la tarea, ya que la concentración iba de las 7 a las 19, todos los días.

Esta “concentración dispersa” se la llamó “punto 3”.

Una vez detectado el avión se pasaba al “punto 2” donde se abordaba la camioneta de Agua y Energía, en el “punto 1” se instalaba en lugar y se conectaban los cables a la fuente de energía.

El “punto 0” por fin se dio el 28 de agosto.

Producida la explosión se retiró el personal del lugar en orden, recuperando todo el equipo.

Efectuada la operación tres fuentes nos informaron que el enemigo tuvo 10, 25 y 40 muertos respectivamente.

Nuestras investigaciones fijaron esa cifra en 34.








NOTA: El presente informe corresponde a un trabajo publicado en la Revista "Evita Montonera" Nº 7

miércoles, 18 de noviembre de 2009

PARTE DE GUERRA DEL 26 DE JULIO DE 1974

¡Al pueblo de Tucumán! En el día de la fecha, la Compañía de Monte "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ" del EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO, procedió al copamiento de las instalaciones de la fábrica NORWINCO (Bella Vista)

Después de reducir al puesto de guardia y desarmarlo, nuestra Unidad tomó el resto de la fábrica, reuniendo al conjunto de los compañeros obreros frente a quienes realizó una arenga, se repartió nuestro periódico Estrella Roja y se pintaron consignas del ERP.
Se recuperaron para la causa del pueblo, dos revólveres 38, tres máquinas de escribir y otros elementos útiles a la prensa revolucionaria.

Ayer, jueves 25, otro sector de la Compañía de Monte "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ" expropió un camión del Ingenio San Pablo que transportaba 385 bolsas de azúcar.
Éstas fueron luego repartidas entre los pobladores de Villa Carmela.

El jueves 11, la Compañía de Monte repartió entre los vecinos de una población del sur de la provincia, frazadas, pantalones, camisas, zapatillas, etc.
Esta ropa fue comprada con parte del dinero que la empresa imperialista yanki ESSO debió pagar por la libertad de uno de sus más altos representantes en el país, Víctor Samuelson, quien oportunamente había sido detenido por el ERP.

En las tres operaciones detalladas nuestros combatientes cumpliendo con planes prefijados, no tuvieron inconvenientes y se retiraron en perfecto orden.

Comunicado.

Sabemos que estas acciones no son ninguna solución definitiva para los problemas de los trabajadores.
A través de las mismas sólo devolvemos al pueblo parte de lo que los patrones les arrancan a diario.
Además, en contacto directo con los compañeros trabajadores podemos explicarles porqué combate nuestro ERP, por qué ha empezado a combatir en Tucumán la Unidad de Monte "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ".

La guerrilla rural es un gran paso adelante en la construcción de un poderoso EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO que destruya para siempre el régimen explotador en nuestra patria.
Sepan los patrones que su desarrollo es producto de la decisión de todo el pueblo tucumano de luchar unidos hasta acabar con los explotadores y formar la patria de los obreros: LA PATRIA SOCIALISTA.

LA COMPAÑÍA RAMÓN ROSA JIMÉNEZ ES EL BRAZO ARMADO DEL PUEBLO TUCUMANO.

NINGUNA TREGUA A LAS EMPRESAS IMPERIALISTAS!

¡NINGUNA TREGUA AL EJERCITO OPRESOR!

¡LA SANGRE DERRAMADA NO SERÁ NEGOCIADA!

¡A VENCER O MORIR POR LA ARGENTINA!

martes, 17 de noviembre de 2009

LA GUERRILLA RURAL Y URBANA

La iniciación de la actividad militar en las zonas rurales por parte de la Compañía de Monte Ramón Rosa Jiménez abre un nuevo período en la guerra revolucionaria en nuestra patria.
Este nuevo período, es precisamente la respuesta que requiere la actual situación de la lucha de masas.

El auge ininterrumpido de las luchas populares, que arranca del histórico Cordobazo, vio surgir de su seno a las formaciones guerrilleras que hasta el presente desarrollaron su actividad fundamentalmente en las ciudades.
La necesidad de dar un nuevo impulso a esas luchas, que se adecuen a la actual situación plantea como objetivo inmediato la generalización de la guerra, llevando el teatro de la misma hasta las zonas rurales, que hasta el presente se habían mantenido al margen de la actividad militar.
Nuestra guerra revolucionaria es una guerra popular y como tal se asienta sobre dos concepciones básicas:
el desarrollo de lo pequeño a lo grande y la incorporación de las masas a la guerra.
Esta dos concepciones han presidido el desarrollo general de la actividad militar-urbana y se extiende también a las formaciones rurales.
El desarrollo de la guerrilla de lo pequeño a lo grande está determinado por la situación objetiva de tener que enfrentar a un enemigo superior en fuerzas y técnica.

Por eso, la lucha es iniciada por pequeños destacamentos que en el transcurso de la lucha y en la medida que se de la otra premisa
-la de la incorporación cada vez más creciente de las masas a la lucha armada- éstos van creciendo en cantidad y también en calidad hasta convertirse en unidades mayores, en condiciones de pasar a disputar zonas al enemigo y garantizar zonas liberadas.
La guerrilla que hasta el presente ha combatido en las ciudades creció considerablemente.
Desde aquellos destacamentos de combatientes, que hace ya más de tres años comenzaron a combatir contra la dictadura y el imperialismo, la guerrilla urbana fue desarrollándose paulatinamente, al compás de las luchas populares.
Así se constituyen fuertes unidades, que realizaron acciones de envergadura estratégica.
Tales los copamientos del Batallón 141, de la unidad de tanques de Azul, etc.
El comienzo de la guerrilla en el campo es el paso necesario para dar continuidad a este proceso de lucha armada en la ciudad, combinado con el nivel cada vez mayor de las luchas de la clase obrera y el pueblo y la consiguiente profundización de la conciencia política de las masas.

CARÁCTER ESTRATÉGICO DE LA GUERRILLA RURAL.

Desde el momento de la iniciación de la guerrilla rural, se inicia un nuevo período de desarrollo de las fuerzas armadas populares, que permitirá multiplicar las fuerzas de la misma.
Aumentará la potencia de fuego de la guerrilla y la preparará y capacitará para enfrentarse en combates abiertos a las fuerzas del enemigo.

La guerrilla rural tiene la característica que permite, gracias al auxilio de la geografía la construcción relativamente veloz de poderosas unidades de combate.
En efecto, para la construcción de un poderoso ejército revolucionario que supere el nivel de las pequeñas unidades de combate que generalmente combaten en las ciudades, el monte tiene una importancia fundamental.

Es por ello, que la apertura del frente rural adquiere en estos momentos una dimensión estratégica.
Este hecho hará posible la formación de poderosas unidades bien armadas y entrenadas, con capacidad para golpear duramente al enemigo en el terreno que a las fuerzas revolucionarias les resulta más favorable.
La consolidación de estas unidades permitirá disputar al enemigo zonas geográficas, primero durante la noche y luego durante el día.
En la medida en que el paralelo desarrollo de la lucha política y la aplicación de una correcta línea de masas a la actividad militar, fortalezca y engrose las columnas guerrilleras, si será posible liberar zonas y construir más adelante sólidas bases de apoyo.
Esto es imprescindible para la construcción de un fuerte y poderoso Ejército Revolucionario del Pueblo, de carácter regular, dotado del armamento necesario para batir militarmente a las fuerzas enemigas, desarrollando la guerra de posiciones y aniquilando sectores de las FF.AA. Contrarrevolucionarias.

RELACIÓN GUERRILLA URBANA y RURAL.

La guerra popular se asienta en las masas populares y explotadas, en todas aquellas capas de la población que junto a la clase obrera, sienten en menor o mayor medida la opresión imperialista.
Por ello, la guerrilla se desarrolla en todos aquellos lugares donde están las masas, adquiriendo por eso en nuestro país un carácter nacional; es decir que la lucha armada se extiende a todo el país, adaptando sus formas concretas a la realidad de cada región.

Se puede decir que a grandes rasgos se asienta en dos características principales:
La lucha armada en el campo, con características de guerra de guerrillas primero y guerra de movimientos después, y la lucha armada en las ciudades partiendo de acciones de recuperación y resistencia hasta llegar a operaciones de envergadura.
En ese sentido, ambas actividades se combinan e interrelacionan, contribuyendo desde distinto ángulo a un solo objetivo:
desarrollar una lucha de desgaste de las fuerzas enemigas; desgaste moral, humano y material.
En el campo, dispersando a través del terreno a importantes fuerzas del enemigo en cercos, peines, patrullas, vigilancia, quebrando su capacidad ofensiva, golpeándolos cada vez con mayor fuerza en la medida en que comienza a formar unidades estratégicas.
En la ciudad, aferrándolas al terreno.
Las continuas incursiones de los destacamentos de la guerrilla urbana obligan al enemigo a mantener importantes contingentes armados en la defensa de los objetivos militares de las ciudades, que quedan de esta forma inmovilizados.
De esta forma, en un proceso a la vez interrelacionado y paralelo, la lucha en las zonas rurales y las urbanas contribuye dialécticamente a la formación de las unidades del Ejército del Pueblo, ya la aniquilación y la derrota de las fuerzas armadas enemigas.

CAPACIDADES QUE SE ATRIBUÍA A LA GUERRILLA (1975).

Atacar por sorpresa, en cualquier momento, alguna o varias localidades menores de los departamentos de Famaillá y Monteros (ingenios La Fronterita, Santa Lucía y Santa Elena), ocupándolas por un tiempo relativamente breve, eliminando personalidades, destruyendo instalaciones policiales y difundiendo proclamas subversivas, a fin de desprestigiar al Ejército y mantener controlada a la población.

Atacar por sorpresa una o más localidades importantes situadas a lo largo de la ruta Nro. 38 (Lules, Famaillá, Acheral y Monteros), con la Ca. Mte. R.R.J., reforzada con elementos de otras provincias (Córdoba y/o Santa Fe), reteniendo la localidad hasta la iniciación de un ataque con efectivos superiores.

Atacar instalaciones policiales en la provincia e instalaciones militares con efectivos que pueden variar desde un pelotón (30 hombres) a una compañía (120 hombres), según el objetivo.

Continuar la tarea de reclutamiento, adoctrinamiento e instrucción de elementos del campesinado tucumano, así como la captación de dirigentes gremiales y comerciantes, a fin de lograr importantes apoyos entre la población obrera y entes empresariales.

Desde Tucumán, continuar desarrollando e incrementando una campaña de propaganda destinada a captar políticamente a las masas hacia el PRT, tanto en el sector urbano (establecimientos fabriles) como en el sector rural (ingenios).

Replegar sus efectivos rurales ante un operativo exitoso guerrillero sobre las poblaciones a lo largo de la ruta Nro. 38 o instalaciones militares y policiales en el ámbito urbano.

Retirar sus efectivos rurales de sus actuales emplazamientos ante un eventual operativo de las fuerzas legales en su zona de influencia evitando un combate frontal y, ante el fracaso de su accionar, poder desplazar sus combatientes hacia el norte, particularmente a las provincias de Salta y Jujuy, próximas a la frontera con Bolivia.

lunes, 16 de noviembre de 2009

TOMA DEL PUEBLO DE ACHERAL

A las 20.30 horas del día 30 de Mayo, una sección de la COMPAÑÍA DE MONTE "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ" del EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO.

Procedió a tomar distintos objetivos de la población de ACHERAL, Departamento de Monteros, Provincia de Tucumán.

Fue copada la Comisaría, Oficina Telefónica, Estación Ferroviaria y rutas de acceso.

Esta operación tiene carácter de repudio al reciente operativo antiguerrillero Federal y Militar, una de cuyas bases principales fue precisamente Acheral, convertida en base de helicópteros y punto de concentración de las fuerzas represivas durante los días que duró la fracasada movilización contrarevolucionaria.

La COMPAÑíA DE MONTE "RAMÓN ROSA JIMÉNEZ" acantonada en período de instrucción en la zona serrana de RODEO VIEJO, fue atacada en una operación de cerco por fuerzas policiales con apoyo militar.

El cerco enemigo se burló en una marcha de una semana e inmediatamente después, tomando la iniciativa, nuestra guerrilla pasa a la ofensiva con la acción de Acheral.

Respecto a la publicitada operación de cerco del enemigo es necesario aclarar a nuestro pueblo que es falsa la información proporcionada sobre el secuestro de carpas, pistolas, revólveres, explosivos y material quirúrgico de nuestra unidad.

Esta primera actividad del ERP en el monte inicia un nuevo período en el desarrollo de las Fuerzas Armadas de la clase obrera y el pueblo argentino y tiene una profunda significación.

A partir de ahora, uniéndose y complementándose, las guerrillas urbanas y rurales avanzarán con una nueva dinámica hacia la formación de un poderoso EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO capaz de enfrentar exitosamente en combates y batallas cada vez más importantes a las fuerzas represivas y apoyar firmemente con sus armas la constante y consecuente lucha del pueblo argentino por su liberación nacional y social.

Las fuerzas policiales federales que con apoyo militar volcaron su prepotencia y su odio al pueblo en territorio tucumano, han merecido el repudio popular y deben saber que en sus próximas incursiones encontrarán activa resistencia de nuestra unidad.

La llama de la rebelión popular ya está encendida también en el monte y se expandirá incontenible pese a todos los esfuerzos represivos de explotadores y opresores.

¡FUERA LA REPRESIÓN FEDERAL Y MILITAR!

¡VIVA LA GUERRA POPULAR REVOLUCIONARIA!

¡A VENCER O MORIR POR LA ARGENTINA!

domingo, 15 de noviembre de 2009

DECRETO DEL PODER EJECUTIVO

Operación Independencia.
Decreto del Poder Ejecutivo Nacional.

El Poder ejecutivo Nacional.

Buenos Aires, 05 de febrero de 1975.

VISTO.

Las actividades que los elementos subversivos desarrollan en la Provincia de TUCUMAN y la necesidad de adoptar medidas adecuadas para su erradicación:

LA PRESIDENTE DE LA NACIÓN ARGENTINA.

En acuerdo General de Ministros,

D E C R E T A:

ARTICULO 1º . - El Comando general del Ejército procederá a ejecutar las operaciones militares que sean necesarias a efectos de neutralizar y/o aniquilar el accionar de los elementos subversivos que actúan en la Provincia de TUCUMÁN.

ARTICULO2º . - El Ministerio del Interior pondrá a disposición y bajo control operacional del Comando General del Ejército los efectivos y medios de la Policía Federal que le sean requeridos a través del Ministerio de Defensa, para su empleo en las operaciones a que se hace referencia en el Articulo 1º.

ARTICULO 3º . - El Ministerio del Interior requerirá al Poder Ejecutivo de la Provincia de TUCUMÁN que proporcione y coloque bajo control operacional el personal y los medios policiales que le sean solicitados por el Ministerio de Defensa (Comando General del Ejército), para su empleo en las operaciones precitadas.

ARTICULO 4º . - El Ministerio de Defensa adoptará las medidas necesaria para que los Comandos Generales de la Armada y de la Fuerza Aérea presten, a requerimiento del Comando General del Ejército el apoyo necesario de empleo de medios para las operaciones.

ARTICULO 5º . - El Ministerio de Bienestar Social desarrollará, en coordinación con el Ministerio de Defensa( Comando General del Ejército), las operaciones de acción cívica que sean necesarias sobre la población afectada por las operaciones militares.

ARTICULO 6º . - La Secretaria de Prensa y Difusión de la Presidencia de la Nación, desarrollará a través del Ministerio de Defensa (Comando General del Ejército) las operaciones de acción sicológicas concurrentes que le sean requeridas.

ARTICULO 7º . -Los gastos que demande el cumplimiento de la misión encomendada por el presente decreto hasta la suma de CUARENTA MILLONES será incorporada a la jurisdicción 46, Comando General del Ejército, correspondiente al Presupuesto del Año 1975.

ARTICULO 8º . -Las disposiciones del presente Decreto rigen a partir de la fecha.

ARTICULO 9º . - Comuníquese, deseé a la Dirección Nacional del Registro Oficial y Archívese.

DECRETO “S “ Nº 261.

Maria Estela Martínez de Perón Presidente de la Nación.
Antonio Benítez Ministro de Justicia.
Alberto Rocamora Ministro de Defensa.
José López Rega Ministro de Bienestar Social.
Oscar Ivanissevich Ministro de Cultura y Educación.
Alfredo Gómez Morales Ministro de Economía.
Alberto J. Vignes Ministro de Relaciones Exteriores.
Ricardo Otero Ministro de Trabajo.